Gaspar de Guzmán y Pimentel
Conde-duque de Olivares
El Conde-duque de Olivares nació el 6 de enero de 1587 en Roma (Italia).
Hijo del conde de Olivares.
Inició estudios de derecho canónico en la Universidad de Salamanca y la carrera eclesiástica, pero la temprana muerte de sus hermanos mayores le convirtió en heredero del título paterno y abandonó los estudios universitarios.
En 1607, siendo ya conde Olivares, partió hacia Sevilla para ocuparse de su patrimonio y allí participó en la vida social y mantuvo una intensa actividad de mecenazgo literario y artístico.
Contrajo matrimonio con Isabel de Velasco, dama de honor de la reina Margarita de Austria. Se trasladó a la corte en 1617 como gentilhombre de cámara del príncipe (futuro Felipe IV) y su tío, Baltasar de Zúñiga, actuó como su protector en las intrigas cortesanas que produjeron la caída del duque de Lerma y el posterior valimiento del de Uceda, al mismo tiempo que se ganaba la confianza del príncipe.
Al acceder al trono Felipe IV (1621), aumentó su influencia con el desempeño de los oficios palatinos de sumiller de corps (1621) y caballerizo mayor (1622), que le proporcionaron un acceso casi constante al rey. La visita del príncipe Carlos de Gales, heredero del trono inglés, le dio la primera ocasión de actuar como favorito del monarca (1623). Desde entonces, basó su poder en la relación de amistad mantenida con Felipe IV y en la colocación de sus fieles en las instituciones de gobierno.
Fue decisivo su control sobre el reparto de distinciones sociales y recompensas económicas, lo que le permitió crear una amplia red clientelar que le servía en espera de recibir cargos, honores y beneficios. Contó con un programa político reformista, expresado en el Gran Memorial (1624). En este texto elevado al rey se planteaba un reparto proporcional entre todos los reinos del coste de la defensa de la Monarquía (Unión de Armas), una profunda reforma de la Hacienda castellana y de la estructura institucional del gobierno. Quiso también el establecimiento de un sistema bancario nacional que sustituyera la dependencia de los banqueros extranjeros por una red de bancos llamados erarios.
Cuando intentó aplicar sus proyectos encontró la fuerte oposición de las Cortes castellanas y de los otros reinos peninsulares. Las ciudades de Castilla con representación en Cortes temían que la reforma fiscal les hiciera perder las contrapartidas que habitualmente obtenían de la corona cada vez que se votaban los subsidios. Mayor recelo levantó en las instituciones de los reinos de la Corona de Aragón el proyecto de la Unión de Armas, pues se interpretó como un ataque a sus fueros que perseguía imponer el modelo castellano y acabar con sus libertades tradicionales.
A ello se sumaron los gastos de la guerra de Flandes, que provocaron la bancarrota de 1627, y el peligro de guerra con Francia, constante desde 1630. En 1635, la ruptura de hostilidades con la Francia de Richelieu, le obligó a posponer las reformas y a concentrarse en la defensa. La situación empeoró en 1640, año del levantamiento de Cataluña y la secesión portuguesa. Con la Monarquía al borde de la quiebra, la oposición interna, compuesta fundamentalmente por la aristocracia castellana, se cargó de razones y, finalmente, Felipe IV decidió prescindir de Olivares (1643).
Éste se retiró a Loeches, donde publicó el Nicandro, una apología de su gobierno. Felipe IV le obligó a trasladarse a Toro, localidad donde el conde-duque de Olivares falleció el 22 de julio de 1645.
Cargos
Secretario de Despacho Universal de la Monarquía Católica
(Valido del Rey de España)
25 de enero de 1622-19 de octubre de 1645
Casa Real
Casa de Olivares